
Pesca del tataki
marzo 28, 2025
Picas de apertura
mayo 19, 2025Astuto y desconfiado
Texto y fotografías de Marco Altamura
En este extraño comienzo de primavera, tras unas cuantas salidas para comprobar las condiciones inadecuadas para pescar en aguas corrientes, me dediqué al spinning ligero en aguas lacustres en busca de uno de los peces más desconfiados y vigilantes de que pueden presumir nuestras aguas interiores: el cacho.
Muchos pescadores locales descartan inmediatamente la cuestión alegando que el cacho no es un pez noble y no merece su atención. La verdad es bien distinta: el desafío a este astuto ciprínido mediante spinning representa una de las pruebas más duras a las que puede enfrentarse un pescador de spinning.

Nunca como en este caso el equipo debe ser un "combo" perfecto en todos los elementos. Personalmente, utilizo una caña de 2,40 metros de longitud con una potencia efectiva en el rango de 5/15 g, a la que combino un carrete de tamaño 2500/3000 cargado con un excelente sedal súper trenzado como Asso 8XPE Micro Braid de 0,12 mm de grosor, a cuya parte superior ato con un nudo Albright doble un trozo de aproximadamente un metro de Asso Super Fluorocarbon 0,18/0,20 mm de grosor. Este trenzado (el Microtrenzado), gracias a su alargamiento casi nulo y a sus cualidades de resistencia a la abrasión, permite pescar con seguridad incluso a grandes distancias, y el terminal de flúor garantiza una resistencia absoluta y la invisibilidad en el agua, algo muy apreciado cuando te enfrentas a un pez tan desconfiado.
Como artificiales, sólo utilizo minnows lipless de 9 cm con actitud de hundimiento y sábalos de silicona de 10 g.
En esta hilatura "astuta", nos pueden ayudar las brisas periódicas que a menudo soplan del oeste sobre nuestras grandes cuencas prealpinas del norte de Italia, confundiendo un poco nuestras trampas y permitiéndonos realizar capturas dignas de mención que pueden superar fácilmente los 2 kilos de peso en estos amplios espacios.

La acción de pesca permite inspeccionar las primeras capas de la columna de agua con lentas y constantes recuperaciones, que se ven contrarrestadas por los ataques decididos y casi brutales de estos extraordinarios depredadores que no dudan en atiborrar nuestros señuelos y entablar, al menos en los primeros momentos, una lucha cargada de adrenalina, debido también a su considerable peso. Recomiendo probar suerte con este astuto pez, porque si acertamos en este tipo concreto de pesca con señuelos ligeros, podremos afrontar todos los demás retos con nuestros depredadores locales como vencedores.